Revisión de Lenovo Yoga Book C930: 3 en 1, maestro de nada

Por un tiempo, parecía que el Lenovo Yoga Book no iba a regresar. El 2 en 1 ultradelgado estuvo agotado durante meses y no había señales de un modelo de reemplazo. Pero la línea ha sido revivida inesperadamente, y renovada, con el lanzamiento del exclusivo Yoga Book C930.

Dimos el ultimo Libro de Yoga Lenovo las mejores calificaciones por su versatilidad e innovación, pero no estaban tan interesados ​​en su rendimiento lento y su teclado HALO virtual. El Yoga Book C930 es un importante paso adelante, con una resolución de pantalla más alta y una pantalla secundaria de E Ink que cambia entre los modos de teclado, dibujo y libro electrónico. Sin embargo, el precio se ha duplicado desde la última vez y he pasado una semana tratando de averiguar por qué.

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Revisión de Lenovo Yoga Book C930: lo que necesita saber

Como todos los dispositivos Lenovo Yoga, el Yoga Book C930 es un portátil con pantalla táctil 2 en 1 con una bisagra de 360 ​​grados. Sin embargo, es más compacto que cualquier otro Yoga, con un peso delicado de 0,75 kg y un grosor de solo 9,9 mm cuando está cerrado debido a la ausencia de un teclado físico.

En cambio, el Yoga Book C930 tiene una pantalla táctil secundaria E Ink Full HD de 10,8 pulgadas que funciona no solo como un teclado virtual y una superficie de dibujo, sino también como un lector de libros electrónicos. Supongo que podría llamarlo 3 en 1: ¿tal vez el equipo de marketing de Lenovo perdió un truco allí?

La pantalla táctil principal, por cierto, es del mismo tamaño pero utiliza un panel IPS de 2.560 x 1.600 IPS retroiluminado a todo color de mayor resolución. Mi unidad de revisión del Yoga Book C930 funciona con un Intel Core i5-7Y54 de doble núcleo a 1.2GHz, ayudado por 4GB de RAM. Hay un SSD de 256 GB en el interior, aunque se puede completar con una microSD, hasta un total de 512 GB. Anteriormente, el Yoga Book se vendía con la opción de un sistema operativo Android o Windows, pero Lenovo ha eliminado Android para el C930, que se ejecuta exclusivamente en Windows 10 Home.

Revisión de Lenovo Yoga Book C930: precio y competencia

Como se mencionó anteriormente, el Yoga Book ha duplicado su precio desde la última versión. Es normal ver aumentos de precios constantes con las nuevas generaciones de dispositivos (ver todos los productos de Apple), pero un aumento del 100% es un gran aumento. La especificación básica de Android Yoga Book de 2016 se lanzó a £ 450, mientras que el modelo de Windows más barato costaba £ 100 más a £ 550. Ahora, el Yoga Book C930 comienza en £ 1,100. En cuanto al modelo que me enviaron a revisar, el precio vuelve a subir a £ 1300. Eso ni siquiera incluye el lápiz óptico Precision Pen opcional, que agrega £ 90 adicionales.

No hay nada como el Yoga Book C930 con sus pantallas duales de 10,8 pulgadas y, en ese sentido, no tiene mucha competencia directa. Señalaré que por £ 1,330 (£ 30 más que este Yoga Book C930) podrías comprar un Dell XPS 13 2 en 1 con una CPU Intel Core i7. El nivel medio Microsoft Surface Pro 6 cuesta £ 1,375 con la funda con teclado Signature y el Surface Pen incluidos, que sigue siendo más barato que el Yoga Book C930 con su Precision Pen.

Por 1.300 £ también puedes comprar el Lenovo Yoga C930 (nombre similar, dispositivo diferente), un 2 en 1 excepcional que se presentó junto con el Yoga Book C930 en IFA 2018. Y no debería dejar fuera el Apple iPad Pro de 12,9 pulgadas, disponible desde £ 1,287 con el lápiz y el teclado incluidos. Por supuesto, funciona con iOS, por lo que no obtienes la verdadera experiencia de una computadora portátil, pero es la tableta más rápida del mercado y tiene mucha más potencia que la Yoga Book C930.

Revisión de Lenovo Yoga Book C930: diseño

De la misma forma que el Yoga Book C930 no tiene competidores, tampoco hay nada que se le parezca, aparte del antiguo Yoga Book, claro. Cerrado, son solo dos losas de aluminio gris hierro unidas por la funky bisagra de "correa de reloj" de Lenovo. Es algo pequeño y se desliza fácilmente en un sobre A4 con amplio espacio de sobra en todos los lados.

Para abrirlo, golpea dos veces la tapa con un nudillo. Esto hace que la tapa se abra una grieta y, desde allí, la pantalla se puede levantar fácilmente a su posición. Además de verse bien, esta función de golpe para abrir está inteligentemente diseñada, utilizando dos imanes opuestos que se separan mediante golpes sucesivos. Para abrir la computadora portátil de una manera menos dramática, simplemente mantenga presionado el botón de volumen en el borde derecho.

Una vez abierto, se le presentan dos pantallas. Arriba está la pantalla IPS de 10,8, encajonada en todos los lados por biseles que son notablemente grandes para una computadora portátil lanzada originalmente en 2018. La cámara web también vive por encima de la pantalla, pero no hay obturador de privacidad de la cámara como en el Lenovo Yoga C930. Tampoco hay una cámara infrarroja secundaria para el desbloqueo facial, aunque la primera generación de Yoga Book sí la tenía.

Donde normalmente estaría el teclado es un panel suave de 10,8 pulgadas. Esta es la pantalla táctil “Flexible E Ink Mobius”, que ha reemplazado el teclado y el bloc de notas HALO del último Yoga Book. Es posible que esté familiarizado con la tecnología E Ink si alguna vez ha utilizado un lector de libros electrónicos pero esta es una versión modificada de la tecnología que incorpora un teclado y funciones de dibujo. Más adelante profundizaré en estos modos. Encima del teclado hay un lector de huellas dactilares semi-confiable que se mancha con demasiada facilidad y, por lo tanto, no siempre funciona.

Aquellos acostumbrados a las computadoras portátiles tradicionales tendrán dificultades para adaptarse a la falta de puertos del Yoga Book C930. Además de una ranura dual para microSD y SIM en el borde izquierdo, hay dos ranuras USB tipo C (Gen 1), una a cada lado, pero una de ellas generalmente estará ocupada por la fuente de alimentación. Eso te deja con un solo conector para conectar un dispositivo periférico. Lenovo ni siquiera ha proporcionado un conector de audio de 3,5 mm para auriculares, lo que significa que deberá usar un adaptador (no incluido) o auriculares Bluetooth para escuchar audio de forma privada.

Y se recomiendan auriculares, ya sea que esté en público o no, porque la salida de audio de los parlantes laterales dobles del Yoga C930 podría ser mejor. Aunque no es abismal, no es un sonido tan fuerte o nítido como cabría esperar de una computadora portátil que cuesta más de £ 1,000.

Es decepcionante que el lápiz óptico Precision Pen (£ 90) tampoco esté incluido, ya que ya está gastando tanto. Este es un lápiz óptico metálico que funciona con baterías, un poco más largo y grueso que un bolígrafo Bic Biro, tiene dos botones y se adhiere magnéticamente a la parte posterior de la computadora portátil cuando no está en uso. El lápiz de precisión no es esencial para las actividades estándar de la pantalla táctil, pero lo necesitará para aprovechar al máximo la pantalla de entrada de tinta electrónica.

Revisión de Lenovo Yoga Book C930: teclado E Ink y E Ink Note

La pantalla E Ink es la característica estrella del Yoga Book C930 y el éxito de la computadora portátil depende de que funcione bien. Puedo ver el atractivo porque realmente es versátil, pero no estoy completamente convencido de los aspectos prácticos. Empezaré con el teclado virtual. Hay dos diseños disponibles, moderno o clásico, y también puede elegir entre estilos en blanco o negro. Elija lo que elija, no hay forma de evitar la respuesta de tecla lenta, que se queda atrás incluso con una velocidad de escritura modesta.

Y dado que estas no son teclas reales, sino sensores en un panel, no tienen retroalimentación táctil, lo que hace que sea inmensamente difícil de escribir. Al escribir, me encontré mirando hacia abajo casi constantemente para asegurarme de que mis manos permanecían en el lugar correcto. Puede configurar el teclado para que vibre cuando presione una tecla, pero incluso con este ajuste a la máxima fuerza, no hay suficiente sensación para que se sienta como si realmente estuviera escribiendo. El panel táctil virtual también es anormalmente pequeño y frustrante de usar. En el diseño de teclado "moderno" es solo un pequeño botón que se expande cuando lo tocas, se traga la barra espaciadora y desaparece cuando se presiona cualquier otra tecla.

Es molesto que el lápiz óptico Precision Pen no pueda interactuar con el teclado E Ink. Cuando ya está sosteniendo el lápiz, parece que esto sería más intuitivo que abrir el teclado en pantalla de la pantalla principal, que oculta toda la mitad inferior de la pantalla. La función principal del lápiz es para dibujar en la superficie de E Ink Note, por supuesto, y funciona perfectamente bien aquí. Sin embargo, este modo de "Nota" no está exento de problemas.

Para empezar, el Yoga Book C930 tarda en cambiar entre las funciones de teclado y de nota y, a veces, no se carga por completo. Muchas veces toqué el botón Nota en el panel de E Ink y se me presentó una pantalla en blanco durante cinco segundos, solo para volver al teclado. Cuando llegué al modo Nota, descubrí que era preciso y receptivo, tanto para dibujar como para escribir.

Hay un botón que le permite dibujar con los dedos y el modo Nota también tiene una función de captura de pantalla para realizar anotaciones. Simplemente presione un botón y la pantalla principal se reflejará en la pantalla secundaria. Por supuesto, el modo E Ink Note es completamente en blanco y negro, lo que puede no ser un problema al anotar un documento de Word o PDF, pero para los diseñadores y artistas, la falta de color no es ideal.

Revisión de Lenovo Yoga Book C930: modo de lectura de libros electrónicos

Y ahora, la tercera y última función de la pantalla E Ink: leer libros electrónicos. Lenovo no enumera todos los formatos que puede leer en este modo, pero definitivamente es compatible con EPUB, MOBI, TXT y PDF.

Leer libros electrónicos y archivos PDF en la pantalla es incómodo, por decir lo menos. Debido a que dicha pantalla está conectada a una computadora portátil, es difícil de manejar mientras viaja y no se puede sostener de manera cómoda o segura con una sola mano. Es mucho más fácil sostener la computadora portátil en modo "tienda" y leer con las manos libres. El cambio de página funciona tocando las esquinas, pero esto a menudo no genera respuesta. También existe la opción de mantener la computadora portátil plana y leer en modo horizontal, y puede convertir esto en una extensión de dos páginas con dos páginas más pequeñas visibles una al lado de la otra.

Con 10,8 pulgadas, la pantalla de tinta electrónica del Yoga Book es mucho más grande que el siguiente lector de libros electrónicos más grande que hemos revisado, el Kobo Forma de 8 pulgadas aunque puede comprar un lector de libros electrónicos de 13,3 pulgadas, el Onyx BookMax 2, la pantalla de tinta electrónica del Yoga Book C930 no es la más grande del mundo. La función de libro electrónico es un buen toque, pero la falta de compatibilidad con el formato de archivo Kindle hará que no tenga sentido para muchos. Lenovo no ha dicho si el Yoga C930 será compatible con los libros electrónicos Kindle en el futuro; sin duda sería una buena adición en los modelos futuros.

Revisión de Lenovo Yoga Book C930: pantalla

La pantalla principal del Yoga Book C930 es un asunto más regular. Es un panel IPS táctil de 10,8 pulgadas, 2.560 x 1.600. Tiene un tamaño más parecido al de la pantalla de una tableta, lo que no es ideal para el trabajo, pero la calidad de la pantalla en sí es buena.

Tiene una cobertura de la gama de colores sRGB del 97,2%, aunque existe una tendencia a sobresaturar en gran parte de esta gama: el verde, los rojos y los amarillos son los peores. La pantalla es un toque en el lado reflectante y este efecto se ve agravado por el débil brillo máximo de 308cd / m2. En pocas palabras, es difícil ver la pantalla en exteriores o bajo luces brillantes. Sin embargo, la relación de contraste de 1,174: 1 está bien. Siempre que pueda lidiar con las proporciones diminutas, la experiencia de visualización en el Yoga Book C930 es agradable pero debe tener en cuenta las inexactitudes antes mencionadas si tiene la intención de usarlo para imágenes y videos profesionales trabaja.

Revisión de Lenovo Yoga Book C930: rendimiento y duración de la batería

Lenovo realmente ha escatimado cuando se trata de especificaciones internas, y se muestra en los resultados de las pruebas comparativas. El Yoga Book C930 está equipado con un Intel Core i5-7Y54 de la generación anterior, un chipset de doble núcleo de bajo consumo que se lanzó por primera vez a mediados de 2016. Esto está respaldado por solo 4 GB de RAM. Como era de esperar, estas especificaciones la convierten en la computadora portátil de rendimiento más lento que hemos revisado en años.

En nuestros puntos de referencia multitarea de medios 4K internos, el Yoga Book C930 logró una puntuación general insignificante de 25. Las computadoras portátiles suelen tardar unas horas en superar esta prueba, pero este dispositivo tomó la mayor parte del fin de semana. En el mismo punto de referencia, Microsoft Surface Pro 6 obtuvo un puntaje de 69 en general y eso en realidad está en el nivel más bajo para las computadoras portátiles en este rango de precios. El Yoga Book C930 aún puede manejar un poco de navegación de múltiples pestañas o juegos realmente de gama baja, pero puede olvidarse de la edición de video y los juegos exigentes.

Los resultados de GeekBench que se muestran arriba demuestran aún más las partes internas inferiores del Yoga Book C930. El i5-Y754 del Yoga Book C930 alcanzó una velocidad de múltiples núcleos de 6.500, mientras que el iPad Pro de 12,9 pulgadas y Microsoft Surface Pro 6 obtuvieron el doble.

Es una historia similar en los puntos de referencia gráficos. La CPU del Yoga Book C930 tiene un chip de gráficos Intel HD 615 integrado que realmente no es demasiado, alcanzando una velocidad de cuadro promedio en pantalla de 20 fps en la prueba GFXBench Manhattan y 40 fps fuera de la pantalla (en 1080p). Compare eso con los 59 fps (en pantalla) y 209 fps (fuera de pantalla) puntuados por el iPad Pro de 12,9 pulgadas y podrá ver lo mal equipado que está el Yoga Book C930 para juegos.

A la Surface Pro 6 tampoco le fue tan bien en la prueba de Manhattan, pero fue mejor en el punto de referencia DiRT Showdown de 720p, alcanzando un promedio de 35 fps frente a los 16 fps del C930. Esa es la diferencia entre jugable e injugable, aunque no recomendaría ningún dispositivo para jugar.

El Yoga Book C930 solo está equipado con un SSD de 256 GB, pero el rendimiento en esta área es razonable, con velocidades de lectura de archivos secuenciales de 1200 MB / sy velocidades de escritura de 531 MB / seg. De hecho, es mucho más rápido en el departamento de almacenamiento que Microsoft Surface 6 Pro y, como el gráfico muestra arriba, tiene velocidades de escritura secuencial SSD más impresionantes que el nuevo HP Spectre x360 13 y Yoga C930.

Desafortunadamente, con los resultados de la duración de la batería, volvemos a las malas noticias. En nuestra prueba de rendimiento de batería estandarizada, el Yoga Book C930 duró solo 6 horas y 16 minutos de reproducción continua de video. No es la máquina "maratón" de todo el día que prometió Lenovo, ya que la máquina se apagó dos horas antes que la Surface Pro 6 en la misma prueba. El iPad Pro de 12,9 pulgadas, por otro lado, llegó a las 10 horas y 20 minutos. Si planeas sacar el Yoga Book C930 de la casa, asegúrate de que también venga tu cargador.

Revisión de Lenovo Yoga Book C930: veredicto

A pesar de sus muchas deficiencias, no se puede negar que el Lenovo Yoga Book C930 es único. Es casi la computadora portátil con Windows más portátil que puede comprar y la pantalla E Ink Mobius la hace increíblemente versátil. Sin embargo, la falta de un teclado físico es difícil de conciliar, y si Lenovo planea hacer más Yoga Books como este, necesita mejorar la escritura con E Ink; escribir algo más largo que un correo electrónico en el Yoga Book C930 es doloroso.

Las velocidades horriblemente lentas son otra gran caída del Yoga Book C930 con el chip envejecido de la serie Y de doble núcleo que le da el rendimiento de una tableta Android. No importa cuán útil pueda ser la pantalla E Ink para diseñadores y artistas, y eso es discutible, no es una justificación suficiente para cobrar £ 1300 por este nivel de rendimiento e inconveniencia.